El limón y el vinagre, ¡tus mejores aliados!
Una vez que ya están las huellas marcadas por todas partes,
¡toca limpiar! Esta tarea va a ser mucho más fácil gracias a
estos productos.
Vinagre o limón + agua= éxito.
De esta manera limpiarás tus espejos y cristales sin dejar manchas.
¡Ojo!, evita el uso de papeles que puedan soltar pelusas.